San Pedro de Alcántara, al que llamaban "el segundo Francisco" por sus asombrosas manifestaciones místicas, nació en Alcántara, Cáceres, en 1499 y murió en Arenas de San Pedro en 1562. Deseando que los religiosos fueran más serios y se dedicaran por más tiempo a la oración y la meditación, fundó una nueva rama de franciscanos, llamados de estricta observancia (o “alcantarinos”), que contó con la aprobación del Papa, lo cual no fue un impedimento para sufrir por ella tribulaciones y dificultades, que no hicieron sino fortificar su intensa Fe y su íntima vivencia de Dios.
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Este breve manual para la oración y la meditación es a la vez místico, espiritual y poético…
« Muy magnífico y muy devoto señor:
Nunca yo me moviera a recopilar este breve tratado, ni a consentir que se imprimiese, si no fuese...
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