Ariadna estaba tumbada en el sofá, pensando como siempre que no había nada que ver nada en la tele y cuando estaba a punto de apagarla e irse a acostar, oyó ese ruido, no podía ser nada, estaba sola y la casa cerrada, aun así apagó y se dirigió al pasillo, ¡nada!, la curiosidad .................
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