Víctor Alamazán nació, sin él pretenderlo, en la ciudad de Madrid, allá por el 1974. Su infancia transcurrió en Carabanchel (en el barrio, no en la cárcel) tocando la guitarra en diferentes grupos de los que fue expulsado por no saber distinguir una semicorchea de un Seat Panda. Tras su fracaso como músico decidió encauzar su vida hacia las letras; y todavía hoy paga religiosamente las letras de su hipoteca. Pasó cinco años en la universidad y, sin saber muy bien cómo, salió con la licenciatura en Ciencias de la Información bajo el brazo y comenzó a desarrollar su vocación: guionista. Tras escribir varios guiones de largometraje (algunos premiados por TVE, Antena 3, el ICAA y la SGAE) decidió buscarse un trabajo de verdad, que le pagara esa hipoteca y comenzó a trabajar en televisión, escribiendo series como El Inquilino (Antena3) y programas como El Club de Flo, Sé lo que hicisteis la última semana (La sexta), El rey de la comedia (La 1) y Al Ataque (Telecinco), entre muchos otros. Sin él saberlo, esta experiencia en televisión le iba a dar la idea de partida de su primera novela, La venganza de las cajas.